A Una Amiga(o)
Sabes algo, no es malo estar triste de vez en cuando, es un estado natural del ser humano... parte de la gama de emociones que uno tiene dentro... sólo son distintas tonalidades de una misma energía... el problema aparece cuando sólo nos quedamos en una emoción... ahí es cuando uno debe preocuparse... pero tampoco se pueden forzar las cosas... el tema es que uno mismo debe decirse 'ya no quiero estar así' o 'hoy pase lo que pase voy a ver las cosas de otra manera... nada me va a poner triste...' , es parte de la voluntad que uno pueda poner en cambiar las cosas.
Es cierto también que muchas veces no todo depende de uno, y que tampoco podemos forzarnos nosotros mismos a cambiar... no sirve de mucho decir (racionalmente) 'esto no está bien', y dejar de lado lo que nos dice el corazón... no es tan fácil y eso sucede porque nosotros somos miles de partes por separado, pero que juntas son un todo (que no es lo mismo que la suma de las partes) asimismo no podemos separar una parte de nosotros y decir voy a hacer tal o cual cosa pensando racionalmente y haciendo caso omiso a lo que otra parte del ser dice...
La gran ciencia está en saber compatibilizar ambas cosas, en saber escuchar tanto a la mente como al corazón... no se trata tampoco de decir "lo racional no sirve sólo voy a escuchar a mi corazón", porque claramente lo racional también es parte de uno mismo... y definitivamente hay cosas que uno sabe le hacen mal, que producen daño y que deben evitarse, aunque el corazón diga lo contrario
Personalmente, soy muy emocional, y es difícil hacer converger ambos 'opuestos' (que en realidad no son tal, porque se encuentran en una interrelación, en una relación dialéctica -uno no puede concebirse sin el otro-) pero también soy consciente que en muchas ocasiones es necesario tomar decisiones más racional que emocionalmente, con miras a un beneficio que no siempre es a corto plazo, sino que permite estar bien después... aunque en el momento uno no lo pase muy bien ni lo entienda mucho... (además, eso cuesta demasiado, porque uno puede tomar una decisión, pero mantenerla es muy difícil y generalmente, sobretodo al principio, se terminan pasando por alto)
Piensa que aunque en el cielo aparezcan nubes, las aves no dejan de cantar, porque saben que detrás de ellas igual se encuentra el sol y que tarde o temprano aparecerá...
Te digo otra cosa, yo creo que aunque uno no vea resultados, estos siempre están, sólo hay que mirar las cosas desde otra perspectiva... quizás resulte difícil hacerlo, porque significa cambiar el foco desde el cual uno se para, pero se puede... aunque no te niego que eso cuesta... y mucho... sabes algo, el hombre en general tiene una gran cualidad, y es que puede mantener la esperanza de que las cosas mejoren por mucho tiempo... sin embargo, hay veces que esa cualidad juega en contra de si mismo... aunque el mantener esa pequeña luz nos siga dañando... Y no digo que esté mal mantener las esperanzas, pero hay momentos en que no se saca nada, que el mantenerla sólo dilata las cosas, y no nos deja ser libres para decir 'ya no quiero más de esto'... que es distinto a decir 'yo no debería seguir con esto'... ambas frases están en lógicas distintas, en niveles diferentes... en el deber y en el querer... si digo quiero esto, en cierta manera se absorbe el deber.. lo mismo sucede en el otro extremo, quizás puedo decir que no debo seguir, pero sólo cuando digo no quiero seguir, aparece la posibilidad de cambiar las cosas... antes, estamos atrapados en los deber ser o hacer...
Quizás ahora es difícil ver los resultados de la espera... pero de una manera u otra sirve (o sirvió) para crecer, para madurar cosas, para pensar en qué quiero y en que no quiero.
Sin embargo, no sólo basta con eso, hay algo que no manejamos (aunque si nos gustaría mucho), que- sabiamente- no está en nuestras manos, y eso es el tiempo... cada persona tiene sus propios ritmos y tiempos, en todo lo que haga o deje de hacer... y eso no lo podemos cambiar... sólo resta esperar a que pase, a que se vaya difuminando... lo que no quiere decir que uno olvide, porque eso no sucede nunca... lo que sucede es que uno modifica lo que quiere o siente, es como la energía, no se pierde, nunca desaparece, sólo se transforma; y contrario a lo que uno piensa, el tiempo no mata... apacigua y restaura, transforma... que es mucho más sabio que olvidar algo que en el fondo es parte de uno mismo... son experiencias, y como tales, nos pertenecen y nos configuran. El ser humano se forma en y con sus experiencias, si las olvidamos o las 'matamos' nos matamos a nosotros mismos, por eso éstas se transforman, para que ya no nos dañen (si fuera el caso) al recordarlas, pero nos permitan saber por qué somos como somos y qué queremos ser.
Respecto de las vacaciones, pues tenía bastantes cosas en que pensar, no todas muy agradables, y no todas referidas solamente a mi... supongo que no es a la única persona que eso le sucede... sería inverosímil pensar algo así... no estamos solos en el mundo... y hay muchas personas que pueden tener tantos o más problemas que uno mismo, pero eso no significa que lo que se sienta respecto a ellos los haga más o menos importantes... son importantes y significativos porque uno los codifica así... Por ahí dicen que las cosas son siempre fáciles, el punto es que uno las complica inevitablemente, porque les da significado.
No le des más vuelta a las cosas en tu cabeza, mientras más lo haces, más te confundes y complicas... si te gusta escribir, hazlo, sólo deja que todo fluya... no tienes por qué entregárselo al destinatario o mostrárselo a alguien... sólo deja que salga y date un tiempo y un espacio... quizás después léelo, eso te hace ver las cosas de otra manera... no te cierres tampoco, sólo deja que las cosas pasen sin forzarlas... como el río, todo tiene su curso y tarde o temprano sopla el viento y las nubes se corren, dejando que aparezca el sol...