martes, enero 17, 2006



Papeles...

Hoy estuve revisando algunos archivos, papeles, en fin… miles de cosas escritas hace tanto tiempo… y volví a encontrarme conmigo, con una parte de mi que de cuando en cuando queda sumergida en el ir y venir cotidiano.

De chica escribir era la forma más fácil de liberarme y salir volando, de dejar que la pena, las rabias y las alegrías vivieran más que si sólo las expresaba, y por qué? Simplemente porque cada vez que las volvía a leer volvían a vivir, simplemente porque cada vez que leo algo que hace mucho tiempo fue escrito me hace volver a vivirlo… el tiempo hace estragos en nuestros recuerdos, por mucho que uno no quiera que desaparezcan (o a veces si, depende). El caso es que al volver a leer cada cosa, las escenas vuelven a aparecer frente a mis ojos y son incluso más nítidas y claras, que cuando realmente las viví.

Creo que una gran ventaja de volver a leer después de un tiempo lo que ya sucedió, más allá de la situación en si misma y ver cosas que antes pudieron pasar inadvertidas, es que existe la posibilidad de comprender por qué las cosas se dieron de tal o cual forma después, o bien por qué en situaciones posteriores y similares todo pareció más fácil… sirve para darse cuenta además de todo lo que se ha aprendido en el camino y dar gracias -aunque en su momento pudieran percibirse como malos instantes- de que estuvieran ahí, que hubieran marcado nuestras vidas de una u otra forma, porque sin ellos ya no seríamos lo que ahora somos, ni tendríamos claro lo que queremos y no queremos volver a vivir.